No es la primera vez que, al abrir redes sociales, me encuentro ante la sorpresa de que un conocido está promocionando alguna página de inversión en criptomonedas o pidiendo dinero con urgencia a sus contactos, y no, no es que ahora sean inversores de Wall Street o que tu tío necesite dinero urgente para una operación a corazón abierto, sino más bien que han sido víctimas de Phishing y ahora los ciberdelincuentes están usando su identidad para lucrarse. Es por ello que siempre es un buen momento para repasar una serie de consejos para que no acabes tú también muriendo de la vergüenza al ver como alguien usa tu identidad para desplumar a tus semejantes.
1. Mantén la calma y sé cauteloso: El phishing implica la manipulación psicológica, por lo que es importante que siempre estés alerta y no te dejes llevar por la urgencia o el miedo que puedan generar los mensajes sospechosos.
2. Examina cuidadosamente los correos electrónicos: Verifica la dirección de correo electrónico del remitente y presta atención a posibles errores ortográficos o gramaticales en el mensaje. Desconfía de los correos electrónicos que te soliciten información personal o financiera, especialmente si amenazan con consecuencias si no actúas de inmediato.
3. Evita hacer clic en enlaces sospechosos: Si recibes un correo electrónico o un mensaje con un enlace, no hagas clic directamente. En su lugar, pasa el cursor sobre el enlace sin hacer clic para ver la dirección web real en la barra de estado del navegador. Si parece sospechosa o no coincide con el sitio web que se supone que debes visitar, es probable que sea phishing.
4. No compartas información personal: Nunca compartas contraseñas, números de seguridad social, información bancaria u otra información personal sensible a través de correos electrónicos, mensajes o llamadas no solicitadas. Las instituciones legítimas nunca te pedirán estos datos de forma no segura.
5. Utiliza autenticación de dos factores (2FA): Habilita la autenticación de dos factores siempre que sea posible, especialmente para cuentas y servicios en línea que contengan información sensible.
6. Mantén tus dispositivos actualizados: Asegúrate de tener las últimas actualizaciones de seguridad instaladas en tus sistemas operativos, navegadores y aplicaciones.
7. Utiliza software antivirus y antimalware: Instala un software de seguridad confiable y manténlo actualizado.
8. Verifica el cifrado de los sitios web: Antes de ingresar información confidencial en un sitio web, asegúrate de que la conexión esté cifrada. Busca el candado en la barra de direcciones del navegador y verifica que la URL comience con "https://" .
Recuerda que es fundamental mantener una actitud vigilante y desconfiar de cualquier solicitud de información personal o financiera que parezca sospechosa. Siempre es mejor estar seguro que no arrepentirse cuando te llame tu primo de Murcia preguntando si ya resolviste esos problemas de dinero con la transferencia que te acaba de hacer.